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¿Qué es el freno de mano? Cuándo debo utilizarlo

20 July 2022
¿Qué es el freno de mano? Cuándo debo utilizarlo

Puede que sepas dónde está el freno de mano de tu automóvil , pero ¿sabes qué es y cuándo hay que utilizarlo? El freno de estacionamiento, normalmente denominado freno de emergencia, es un mecanismo incorporado a tu auto que ayuda a mantenerlo parado. 

Es importante que te familiarices con su uso, sobre todo si alguna vez te encuentras en una situación en la que tengas que detenerte rápidamente. En esta entrada del blog, cubriremos los aspectos básicos del freno de mano para que sepas exactamente qué hacer en caso de emergencia. ¡Mantente seguro ahí fuera!

Freno de mano ¿Cómo funciona?

El freno de mano hace parte del sistema de frenado, es un elemento de seguridad vital que ayuda a mantener el automóvil parado, incluso en una pendiente pronunciada. 

Suele estar conectado a los frenos traseros y, cuando se utiliza, ejerce menos fuerza contra los frenos traseros que el sistema de frenado principal. Originalmente, estaban pensadas como un mecanismo de frenado secundario que detendría el vehículo en caso de fallo del freno principal. 

Sin embargo, hoy en día se utiliza principalmente para mantener el vehículo en su sitio cuando está aparcado en una pendiente.

Tipos de freno de mano

Hay dos tipos de frenos de emergencia en general, sin embargo, es mejor consultar el manual del usuario del vehículo para obtener más información sobre el tipo que tiene. Los frenos de mano más comunes son:

El mecánico:

Se activa empujando hacia arriba la palanca, que normalmente se encuentra a la derecha del asiento del conductor.

El eléctrico:

Se activa pulsando un botón o interruptor con la letra "P" escrita en él.

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¿Cuándo usarlo? 

Siempre es buena idea utilizar el freno de mano cuando estacionas, tanto si estás en un terreno llano como en una pendiente. 

Si otro vehículo choca con nuestro carro aparcado, la fuerza del impacto puede hacer que se mueva. Esto puede ser muy peligroso, sobre todo si hay otros carros cerca. Para evitar este riesgo, siempre es mejor poner el freno de mano antes de salir del auto. De este modo, aunque otro automóvil choque con el nuestro, no podrá moverse y será menos probable que cause un accidente.

Al estacionar tu automóvil con el freno de emergencia puesto, básicamente estás bloqueando la transmisión. Esto se debe a que solo el trinquete de estacionamiento, no es suficiente, éste es un dispositivo que controla los frenos. Sin este elemento, tu vehículo podría salir rodando, pero con la ayuda del freno de mano el bloqueo del movimiento es total.  

¿Cuándo no usar el freno de mano? 

No te olvides nunca de soltar el freno de mano antes de arrancar, ya que esto puede causar graves daños. Si tienes puesto el freno de mano y tratas de arrancar el automóvil, lo más probable es que se genere un olor a quemado. 

Esto se debe a que el freno de estacionamiento está diseñado para mantener el vehículo inmóvil y evitar que ruede. Cuando arrancas con el freno de mano puesto, básicamente estás impidiendo que los engranajes se muevan. 

Esto puede dañar gravemente el freno de estacionamiento, así como la transmisión y otras partes del sistema de frenado. 

Tampoco deberías utilizar el freno de mano cuando fallan los frenos hidráulicos, ya que podría provocar un accidente grave. Si la velocidad a la que se conduce el vehículo es excesiva, el uso del freno de mano también puede hacer que el vehículo derrape o pierda el control. 

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Mantenimiento del freno de mano 

El freno de mano es un componente de seguridad crucial en cualquier vehículo. Ayuda a mantener el auto inmóvil cuando está aparcado, y puede utilizarse en caso de emergencia para detener el automóvil si fallan los frenos principales. 

Por ello, es importante comprobar regularmente el freno de estacionamiento y asegurarse de que está en buenas condiciones. Hay algunos signos de que necesita ser ajustado. 

Si, después de poner el freno de mano, notas que el automóvil se desplaza ligeramente, probablemente significa que el cable se está aflojando. Si tienes que aplicar mucha más fuerza de la habitual para accionarlo, puede ser un indicio de que las zapatas están desgastadas o de que se ha acumulado óxido en los cables. 

En cualquier caso, lo mejor es llevar a revisar el sistema de frenado a un centro de servicio automotriz, para que inspeccione y lo repare si es necesario. Si te ocupas del mantenimiento habitual de tu vehículo, puedes ayudar a garantizar tu seguridad y la de los demás.

En Tullanta.com te asesoramos sobre el mantenimiento de tu sistema de frenado para que puedas estar seguro mientras conduces. ¿Has revisado tus frenos últimamente? ¡Asegúrate de hacerlo antes de tu próximo viaje por carretera!